Bienvenido de nuevo al blog de Lanjatrans. Hoy trataremos la importancia económica del transporte para cualquier país, así como los impactos que genera. Está claro que una de las medidas clave de la macroeconomía es el crecimiento económico, donde la logística y el transporte juegan un papel fundamental.
¿Por qué es tan importante la logística y transporte para una economía desarrollada?
Pues bien, una economía desarrollada necesita que la mano de obra se mueva fácilmente entre las empresas y los productos y servicios de las empresas a los hogares.
El sector del transporte y la economía
Existe el argumento de que hay una correlación directa entre el transporte y la riqueza económica. Basándonos en esto, cuanto mayor es el nivel de actividad económica, mayor es la necesidad de un transporte eficiente para asegurar que las mercancías estén en el momento adecuado y el lugar correcto.
Esto conlleva 3 cuestiones:
Sin embargo, esto no significa que tanto el PIB como la actividad de transporte sigan aumentando para siempre. Debe haber un punto de utilidad marginal donde una unidad adicional de crecimiento no tenga ningún efecto sobre el PIB.
Segregación del transporte del PIB
Hay muchos factores no económicos, como la contaminación y los atascos, que desvinculan la actividad del transporte del crecimiento del PIB.
Otro aspecto a tener en cuenta es el aprovechamiento de la geografía de la zona, ya que puede tener efectos negativos sobre el medio ambiente. Nadie espera que toda la tierra se utilice para carreteras y otras infraestructuras logísticas.
Por último, un transporte más eficiente cuesta menos, por lo que el PIB debería aumentar más rápido que el transporte. Esto es debido al aumento de la productividad y las economías de escala, lo que demuestra que se ha producido una disociación del transporte respecto al PIB.
El transporte en un contexto socioeconómico
El concepto del desarrollo de los sistemas de transporte se da a un nivel económico-social.
Si bien las políticas y estrategias de desarrollo tienden a centrarse en el capital físico, en los últimos años se ha observado un mejor equilibrio al incluir cuestiones de capital humano. Independientemente de la importancia del capital físico frente al humano; es innegable que uno no puede existir sin el otro, es decir, ambos tienen que cooperar para que de lugar al desarrollo de la empresa.
Las infraestructuras no pueden seguir siendo efectivas sin las operaciones y el mantenimiento adecuado. Al mismo tiempo, las actividades económicas no pueden tener lugar sin una base de infraestructura. Por eso, muchas actividades de transporte cuyas funciones son altamente transaccionales y orientadas al servicio destacan por la compleja relación entre capital físico y humano.
La eficacia del transporte en la economía
Una logística eficaz se basa en las infraestructuras y la experiencia en gestión. Debido al uso intensivo de las infraestructuras, el sector del transporte es un componente importante de la economía y una herramienta común utilizada para el desarrollo de esta.
Esto es aún más cierto en una economía global donde las oportunidades económicas se han relacionado cada vez más. Gracias a la movilidad de personas y mercancías, incluidas las tecnologías de la información y la comunicación es evidente que existe una relación entre la cantidad y calidad de la infraestructura de transporte y el nivel de desarrollo económico.
La infraestructura de transporte de alta densidad y las redes altamente conectadas se asocian comúnmente con altos niveles de desarrollo. Cuando los sistemas de transporte son eficientes, brindan oportunidades y beneficios económicos y sociales que dan como resultado efectos multiplicadores positivos. Un ejemplo de ello sería una mejor accesibilidad a los mercados, el empleo y las inversiones adicionales.
Cuando los sistemas de transporte son deficientes en términos de capacidad o confiabilidad, pueden tener un coste económico como oportunidades reducidas o pérdidas y menor calidad de vida. A grandes rasgos, el transporte eficiente reduce los costes en muchos sectores económicos, mientras que el transporte ineficiente aumenta estos costes.
Impacto del transporte en la economía
Además, el impacto del transporte no siempre están perfectamente preconcebido y puede llegar a tener consecuencias imprevistas o no intencionadas. Por ejemplo, la congestión es a menudo una consecuencia involuntaria al proporcionar a los usuarios una infraestructura de transporte gratuita o de bajo coste.
Sin embargo, la congestión también es un indicio de una economía en crecimiento donde la capacidad y la infraestructura tienen dificultades para mantenerse al día con las crecientes demandas de movilidad. El transporte también conlleva una importante carga social y medioambiental que no se puede descuidar.
Dimensiones del transporte
Para evaluar la importancia económica del transporte se requiere una categorización de los tipos de impactos que genera. Podemos diversificarla en las dimensiones centrales, operativas y geográficas:
Aparte hay que tener en cuenta los costes asociados para apoyar esta movilidad. Esto implica el establecimiento de rutas que permitan interacciones nuevas o existentes entre entidades económicas.
Esto implica un mejor nivel de utilización de los activos de transporte existentes que benefician a sus usuarios. Es decir, la carga se transporta más rápidamente y con menos demoras.
Otro impacto geográfico importante se refiere a la influencia del transporte en la ubicación de las actividades y sus impactos en el valor de la tierra.
El sector del transporte en la macroeconomía y la microeconomía
Por otro lado, la importancia económica del transporte también puede evaluarse desde la perspectiva macroeconómica y la microeconómica:
En muchas economías desarrolladas, el transporte representa entre el 6% y el 25% del PIB fácilmente. Piense que el valor que representa todos los activos de transporte, incluidas las infraestructuras y los vehículos, pueden llegar a representar prácticamente la mitad del PIB de una economía avanzada.
De media, el transporte representa entre el 10% y el 15% de los gastos domésticos. En comparación, representa alrededor del 4% de los coste de cada unidad de producción en la industria. No obstante, esta cifra varía mucho según los subsectores.
Como ya hemos visto, los efectos positivos causados por el transporte para una economía son innegables. Sin embargo, el valor añadido y los efectos sobre el empleo de los servicios de transporte suelen ir más allá de los generados por esa actividad.
Los efectos indirectos son extraordinarios, ya que, por ejemplo, las empresas de transporte compran parte de los recursos que necesitan (combustible, suministros, mantenimiento, etc..) a proveedores locales. Ayudando a la economía local y generando un valor añadido a esta.
Impactos generados por el transporte en la economía
Según la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (ANFAC), en España el transporte y la logística dan empleo directo a 926.059 personas (según datos del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones) y genera dos millones de empleos indirectos. Por ello, debemos tener en cuenta la importancia económica del transporte.
Podría decirse de forma simplificada que España es un país que vive del turismo, de la fabricación de automóviles y de la agricultura. Fundamentalmente, en la intensiva de las zonas del Levante y del sur peninsular.
Y esta última requiere ineludiblemente del sector del transporte y, más concretamente, del transporte por carretera. Esto es, básicamente por su disponibilidad, flexibilidad y coste, para hacer llegar sus productos de manera competitiva a los mercados centroeuropeos. Además, la logística tiene un efecto multiplicador, ya que los hogares que reciben ingresos del empleo en actividades de transporte gastan parte de sus ingresos en bienes y servicios locales.
Estas compras dan como resultado empleos locales adicionales y valor agregado. Parte del ingreso familiar de estos trabajos adicionales se gasta en bienes y servicios locales, creando así más empleos e ingresos para los hogares locales.
Como resultado de estas sucesivas rondas de reembolsos en el marco de las compras locales, el impacto global en la economía supera la ronda inicial de producción, ingresos y empleo generado por las actividades de transporte de pasajeros y mercancías.
¿Cómo pueden ser los impactos económicos del transporte?
Así, desde un punto de vista general, los impactos económicos del transporte pueden ser directos, indirectos e inducidos:
Las actividades de transporte son responsables de una amplia gama de efectos indirectos de valor agregado y empleo, a través de los vínculos del transporte con otros sectores económicos. Por ejemplo, empresas de suministros de oficina, proveedores de equipo y repuestos, servicios de mantenimiento y reparación, compañías de seguros, etc.
Por ejemplo, la industria del acero requiere la importación rentable de mineral de hierro y carbón para los altos hornos y las actividades de exportación de productos terminados como barreras y bobinas de acero.
El transporte como clave para el crecimiento económico
Los fabricantes, tiendas minoristas y centros de distribución que manejan carga importada en contenedores dependen de operaciones eficientes de transporte y puerto marítimo. El transporte vincula los factores de producción en una compleja red de relaciones entre productores y consumidores.
El resultado es comúnmente una división de la producción más eficiente mediante la explotación de ventajas geográficas comparativas, así como los medios para desarrollar economías de escala y alcance. La productividad del espacio, el capital y el trabajo se mejora así con la eficiencia de la distribución y la movilidad personal.
El crecimiento económico está cada vez más vinculado a la evolución del transporte. Es decir, las infraestructuras, pero también a la experiencia de gestión, que es crucial para la logística. Por lo tanto, aunque el transporte es una actividad intensiva en infraestructura, los activos físicos deben estar respaldados por una variedad de activos blandos, como mano de obra, administración y sistemas de información.
Conclusión
Como resultado, el transporte es uno de los pilares fundamentales para una economía desarrollada. Sin transporte sería inviable la globalización, y sin esta, el impacto socioeconómico mundial tendría proporciones inimaginables, lo que seguramente arrastraría la economía a siglos atrás.
Por suerte, el sector del transporte cada día ofrece un mejor servicio, y su futuro está marcado por la evolución tecnológica ofreciéndonos mejores sistemas de transporte más eficaces, sostenibles y económicos. También hay que destacar que el sector del transporte es una industria estratégica, y lo será todavía más en una economía globalizada.
Es totalmente necesario fomentar el transporte; hay que concienciar de la importancia económica y estratégica del transporte en cualquier país. Además, es necesario apoyarlo apoyarlo en el nuevo entorno competitivo para que ejerza un papel aún más importante en el desarrollo económico y en el posicionamiento mundial de un país.
¿Qué le ha parecido esta entrada sobre la importancia económica del transporte? Esperemos que le haya servido de ayuda.
