El transporte de mercancías es una parte esencial de cualquier cadena de suministro, pero conlleva riesgos inherentes. Para mitigar estos riesgos, el seguro de transporte de mercancías juegan un papel crucial. En esta entrada tratamos de manera genral, lo que necesita saber sobre estos seguros, desde tipos de pólizas hasta consejos prácticos.
Todos sabemos que el transporte de mercancías es una actividad fundamental para el desarrollo económico y social de cualquier país. Sin embargo, también implica una serie de riesgos que pueden afectar a la integridad y el valor de las mercancías transportadas. Desde accidentes, robos, incendios, averías hasta fenómenos naturales, son muchas las situaciones que pueden provocar la pérdida o el deterioro de la carga.
Para evitar que estos percances generen graves problemas a cualquier empresa, es recomendable contar con un seguro de transporte de mercancías. Este tipo de seguro ofrece la protección adecuada para salvaguardar los productos en caso de daño o pérdida durante el transporte, ya sea por vía marítima, terrestre o aérea.
En este artículo, explicaremos en detalle en qué consiste este seguro, los diferentes tipos de cobertura disponibles y las ventajas que puede ofrecer.
Índice de contenidos
Toggle¿Qué es el seguro de transporte?
El seguro de transporte es un contrato que establece que la compañía aseguradora indemnizará por los daños y pérdidas que sufra la mercancía durante el transporte. Esta cobertura se aplica tanto al vehículo de transporte como a los objetos transportados, independientemente del medio de transporte utilizado: fluvial, ferroviario, aéreo o marítimo.
Sin embargo, el seguro de transporte se rige por los principios de indemnidad, que son los siguientes:
- Nadie puede reclamar una indemnización superior al daño real sufrido.
- El seguro no debe generar ganancias o beneficios para el asegurado.
Además, es importante destacar que la indemnización proporcionada por el asegurador no debe ser motivo para obtener beneficios indebidos.
Tipos de seguro de transporte de mercancías
En función del medio de transporte utilizado, existen diferentes tipos de seguros que ofrecen coberturas y condiciones distintas.
A continuación se explican los dos tipos principales:
Seguro de carga terrestre
Este seguro cubre las mercancías transportadas por carretera, ya sea en camiones, furgonetas, remolques o contenedores, y suele aplicarse únicamente al transporte nacional, es decir, dentro del mismo país.
Cubre los daños o pérdidas causados por accidentes, robo, incendio, explosiones, huelgas, disturbios, actos de terrorismo o vandalismo, entre otros riesgos. Sin embargo, el valor de la indemnización dependerá del tipo de mercancía, del valor declarado y de las condiciones de la póliza.
Para más información sobre consejos de seguridad relacionados con el transporte por carretera, le invitamos a consultar nuestro artículo sobre este tema.
Seguro marítimo de mercancías
El seguro de carga marítima protege los productos que se transportan por aire o por agua, ya sea en aviones, barcos o buques. Este tipo de seguro cubre los posibles daños o pérdidas que puedan producirse durante el transporte debido a diversos riesgos, como naufragio, colisión, incendio, explosión, piratería o avería gruesa.
En caso de que la mercancía sufra daños o se pierda, el seguro indemniza el valor de la mercancía, teniendo en cuenta factores como el tipo de mercancía, el valor declarado, las condiciones del contrato y las reglas de York y Amberes.
Tipos de cobertura del flete
A la hora de contratar un seguro de transporte de mercancías, hay que tener en cuenta la frecuencia con la que se transportan las mercancías y los riesgos a los que están expuestas para elegir la póliza de cobertura más adecuada.
La póliza de cobertura es el contrato que especifica qué riesgos cubre el seguro y qué condiciones se aplican. Aunque existen varios tipos de pólizas de cobertura de carga, nos centraremos en las más comunes y en las protecciones que ofrecen.
Póliza a todo riesgo
Es la más completa y ofrece mayor seguridad frente a riesgos externos. Esta póliza indemniza cualquier daño o pérdida que sufra la mercancía por causas ajenas al propietario.
Por ejemplo, si tu mercancía sufre daños por desastres naturales, negligencia, mal embalaje, rechazo en aduanas, abandono o cualquier otro motivo, el seguro a todo riesgo te pagará el valor de tu mercancía.
Póliza de daños particulares
También conocida como «libre de daños particulares», la póliza de peligros nominales es más limitada y sólo protege los daños causados por el buque que transporta la mercancía. Es decir, esta póliza te indemniza por los daños o pérdidas que sufra tu mercancía por colisión, hundimiento, descarrilamiento, falta de entrega, inclemencias meteorológicas, incendio o robo.
Aunque suele ser más barata que la póliza a todo riesgo, es importante tener en cuenta que también tiene más exclusiones en su cobertura.
Póliza única
La póliza única, también llamada póliza de viaje, es una buena opción si las mercancías se envían irregularmente por mar. Esta póliza sólo cubre un viaje concreto y se adapta a sus necesidades.
Por ejemplo, si está empezando su negocio en el mercado internacional y realiza pequeños envíos, una póliza única es su mejor opción. Esta póliza suele ser más económica y flexible que las anteriores.
Póliza de almacén a almacén
Es la opción más común en un entorno de cadena de suministro B2B. Garantiza la protección de las mercancías desde que salen del almacén de origen hasta que llegan al almacén de destino.
Este tipo de cobertura suele incorporar un seguro de carga marítima, aunque es crucial confirmarlo con el transportista responsable.
Póliza de contingencia
La póliza de contingencia está vinculada a los agentes de carga, que actúan como intermediarios para facilitar la búsqueda del mejor transporte para su mercancía.
A veces, tu mercancía puede sufrir daños durante el transporte y el transportista se niega a pagar. En ese caso, el corredor de fletes puede intervenir con una póliza de contingencia y compensar su reclamación. Esta acción no sólo le proporciona una garantía adicional, sino que también evita posibles complicaciones y contratiempos.
Póliza general de avería gruesa
La póliza de avería gruesa es un tipo de seguro que cubre los daños o pérdidas que se producen cuando el capitán del barco tiene que sacrificar parte de la carga o del barco para salvar el resto. Esta situación se conoce como avería gruesa y es menos frecuente que otros riesgos marítimos, como el robo, el hundimiento o el deterioro de la mercancía.
Por todas estas razones, el seguro de transporte de mercancías es una inversión beneficiosa que garantiza la seguridad y el éxito de cualquier empresa en todo el mundo.