/ Historia de Lanjatrans
En el año 1947, un joven José Mingorance trabajaba en Lanjarón con su propio camión marca Internacional, cargando y descargando arena manualmente al modo de entonces, con una pala. Tras siete años de duro trabajo conoció a Rafael Zurita, en aquellos momentos joven gerente de la empresa Balneario y Aguas de Lanjarón, con quien llega a un acuerdo para realizar la carga y transporte de las aguas envasadas por la compañía en dicho municipio granadino.
Como una reliquia se conserva en la actual sede de Lanjatrans el contrato original firmado en
tre José Mingorance y Rafael Zurita, en el que Mingorance se comprometía a asumir el total servicio de transporte de la empresa con vehículos de su propiedad o de terceros.
Desde 1961 hasta 1994, José Mingorance lleva a cabo este servicio para la embotelladora atendiendo rigurosamente las exigencias de la misma. Durante ese período conoce a los diferentes directivos de Aguas de Lanjarón S.A., así como los cambios en la titularidad de la empresa hasta la fecha actual, en la que continúa prestando el servicio de transporte a la compañía, hoy propiedad de Aguas Danone S.A.
Tras su jubilación en 1994, es su hijo Antonio Mingorance, quien, para adaptarse a la nueva normativa del sector de transporte, toma el timón de la compañía. Este, empresario destacado tanto en el sector transporte como en el farmacéutico, desarrolla una política de crecimiento de la empresa que culmina con la absorción de Transarmilla Cargo, entidad que realizaba las funciones de almacenaje de los productos de agua mineral, así como de otras conocidas empresas del sector alimentario como Cervezas Alhambra.
Adquirida la nueva sociedad, Lanjatrans diversifica su actividad con el almacenaje, con el reto de tener que asumir la construcción de una nave en la que hoy en día radica la sede principal de la sociedad, justo coincidiendo con el inicio de la crisis económica de 2008, lo que obligó a redoblar los esfuerzos, tanto de la compañía como de sus trabajadores.
En 2011 se decide abordar una nueva andadura en el mercado de transporte internacional, lo que consolidó la posición de la empresa en el sector generando un importante incremento en su volumen de negocio y una sólida implantación en el ranking de empresas transportistas.
Finalmente, en 2015, accede a la gerencia de la empresa la tercera generación representada por el economista Antonio Mingorance Montes, tras haber pasado por los distintos departamentos de la compañía. Savia nueva para continuar la trayectoria de solvencia y seriedad iniciada por su abuelo.